Rosa Elva del Río Torres es Doctora en Ciencias Químicas; sus temas de investigación son diversos, pues van de los estudios contra el cáncer al mundo de las fragancias femeninas. Nacida en Tierra Caliente, es reconocida, entre otros logros, porque este año se convirtió en la primera michoacana en obtener el Premio Estatal de Ciencia y Tecnología.
Nicolaita desde el bachillerato, la doctora Torres se interesó en la ciencia desde niña, en su natal Apatzingán (marzo de 1957), de la mano de sus maestras de farmacobiología quienes –recuerda– “me motivaron y lograron que viera la química orgánica de una forma distinta, y vi que aquello era muy bonito”.
Por otra parte, su padre murió cuando era pequeña, y algo le marcó que soliera repetirle que “iba a ser química. Por eso cuando la gente me preguntaba yo respondía “química”, sin saber qué era eso; hacía infusiones con alcohol y flores; no sé por qué me lo decía mi papá, algo vio en mí”, expone.
En otro sentido, quizá también se deba a que “uno nace con esas facultades y sólo hay que desarrollarlas, aunque pienso que para mí fue fundamental mi familia, porque es muy importante para apoyar y comprender a quien hace un esfuerzo como estos”.
El hecho, como dijo al recibir el Premio Estatal de manos del Gobernador, Silvano Auroles Conejo, es que el estudio y aplicación de las ciencias resultan difíciles para las mujeres pues deben combinar ese ámbito con el de las ocupaciones domésticas y las responsabilidades familiares.
Sin embargo, “capacidades las tenemos los dos géneros. Hay que buscar, entonces, la oportunidad, luchar y trabajar por ella…, no dejar de intentarlo y seguir luchando con pasión”, aclara con firmeza.
Compuestos y otros misterios
El mundo de la química orgánica puede ser complejo, pero “si realmente es lo que uno busca, si quiere encontrar un compuesto que pueda servir, entonces se trabaja hasta lograrlo”, indica la doctora Torres.
A propósito de lo anterior, actualmente trabaja en la búsqueda “de actividad antimicrobiana y anticancerosa; queremos atacar el cáncer y por ello nuestra investigación nunca termina, porque al igual que los (elementos) anticancerosos y microbianos, los bacterianos también se hacen resistentes, así que la búsqueda debe ser siempre continua”.
Desde el Instituto de Investigaciones Químico-Biológicas de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, la doctora Torres realiza trabajos de laboratorio con la colaboración de otros investigadores, a fin de determinar posibles curas para dicha enfermedad.
“Pero hay que emprender varias fases para llegar a un compuesto exitoso, se requieren 20 ó 30 años y no es fácil; no obstante, si no lo empezamos y no lo hacemos nunca vamos a llegar ahí”, subraya.
En temas más ligeros, la doctora Rosa Elva Torres busca obtener una patente para un fijador de perfume fino en los próximos dos años, “así
(el compuesto) se puede licenciar y se puede comercializar, y es lo que busco, porque generaría empleos en Michoacán y ese es mi sueño, mi legado”.
Por último, dado que pudo permanecer en Francia u otros países, ¿por qué decidió permanecer en Michoacán?“…Quería regresar a mi casa”.