La temporada de arribazón de la tortuga marina en la Costa michoacana es un fenómeno natural tan significativo como lo es la migración de la mariposa monarca en la región Oriente del estado.
Para las dependencias del Gobierno del Estado que forman parte del sector ambiental es de vital importancia el apoyo a los Centros de Protección y Conservación de la Tortuga Marina, aseguró Ricardo Luna García, titular de la Semaccdet. A través del proyecto de Fortalecimiento de los Campamentos Tortugueros, se entregaron apoyos emanados del Fondo Ambiental del Estado durante la temporada pasada, por un millón 71 mil 478 de pesos en equipo, que facilitó el trabajo de las personas encargadas del cuidado de las especies que llegan a Michoacán.
Como parte de este Fortalecimiento de los Campamentos Tortugueros, se entregaron a diferentes centros ubicados en Lázaro Cárdenas 5 cuatrimotos y equipo de radiocomunicación. La recaudación de fondos por parte de la Procuraduría de Protección al Ambiente, ProAm, fue fundamental, al aportar 760 mil pesos a través de una multa impuesta a un infractor ambiental, recurso que fue utilizado para el equipamiento de los campamentos tortugueros, mencionó el secretario Ricardo Luna García.
De las siete especies de tortugas marinas conocidas en el mundo, seis llegan a las costas mexicanas cada año para su proceso de anidación. Esta temporada va de junio a noviembre, aproximadamente. Por cada mil crías que nacen, se calcula que solo una llega a la edad adulta .
Si bien la temporada de tortugas marinas es un aliciente al turismo en la zonas a donde llegan, es importante conocer los retos a los que enfrentan estas especies –todas en peligro. De acuerdo con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), las principales amenazas contra las tortugas marinas van desde la contaminación marítima, el cambio climático, hasta la caza furtiva y el comercio ilegal (como el de los caparazones de la tortuga Carey).
“Las tortugas marinas son un enlace fundamental con los ecosistemas marinos. Ayudan a mantener la salud de los lechos de pastos marinos y los arrecifes coralinos, que benefician a especies con valor comercial, como el camarón, la langosta y el atún”,
La Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial, cuenta con el registro de 19 Centros de Protección y Conservación de la Tortuga Marina, ubicados a lo largo de los 213 kilómetros de playas con que cuenta el estado, en los cuales llegan a desovar las especies laúd, negra y golfina, cuyos huevos son cuidados y custodiados hasta que las crías nacen y son liberadas para que regresen al mar.
En el puerto michoacano están instalados 8 campamentos: Tortuga, Barra de Pichi, Taracosta, Barra de Tigre, Centenario, Las Peñas, Boca Seca y Chuquiapan. En Aquila se encuentran 9 de los campamentos tortugueros: Pichilinguillo, Cachán de Echeverría, Paso de Noria, Motín de Oro, Faro de Bucerías, Ixtapilla, El Tuano, La Placita de Morelos y San Juan de Alima. Mientras que en Coahuayana, hay instalados dos, conocidos como El Ticuiz y Boca de Apiza.