La cultura y naturaleza han tenido siempre una estrecha relación. La prueba palpable de ello, son los conocimientos, saberes, cosmovisiones, prácticas, formas de organización e historias existentes en los pueblos originarios.
La Bioculturalidad es definida por Pablo Alarcón Chaires como “la relación que existe entre la cultura y la naturaleza, lo cual implica que se tiene que reconocer que estamos en un sistema complejo y estar aparentemente alejados en el entorno urbano no exime de vivir o de influir, a veces de sufrir, los procesos que existen en la naturaleza”.
Michoacán, con una fuerte presencia de pueblos originarios y una gran biodiversidad dan cuenta de que cultura y naturaleza no es una casualidad, sino un complejo que permite entender las pautas de comportamiento de sus pueblos indígenas con relación a su entorno natural.
Este término no solo se refiere a pueblos originarios, pero se puede hacer énfasis en ese sentido. Existe evidencia científica que países que tienen una mega diversidad biológica cuentan también con un alto número de lenguas originarias. México ocupa el segundo lugar a nivel mundial en bioculturalidad, es decir, somos responsables de cuidar, preservar y dar vialidad a la diversidad que se encuentra en el territorio mexicano.
Los pueblos indígenas usufructúan y son propietarios de alrededor del 15 por ciento del territorio terrestres, el 50 por ciento de la población depende de la producción y prácticas indígenas para su alimentación y subsistencia, “dentro de sus territorios se capta la cuarta parte de la lluvia; se mantiene la mayor parte de las selvas bien conservadas; realizan el 95 por ciento de la agricultura orgánica; manejan junto con ejidos el 70-80 por ciento de las selvas y bosques; mantienen in situ la diversidad agrícola y genética del país y realizan la conservación comunitaria en cerca de 1 millón de hectáreas”.
Michoacán al ser el quinto estado con mayor biodiversidad del país, también cuenta con poblaciones originarias quienes en gran parte se encargan de resguardar la riqueza natural. Existen alrededor de mil 845 ejidos y comunidades indígenas en el estado; del total de la población, ocupan el 5 por ciento, destacan las etnias Purépecha, Nahua, Ñhañú y Mazahua.