Durante la temporada primavera-verano es importante tomar precauciones, como cuidar nuestra piel y evitar la deshidratación; pero también podemos divertirnos y Michoacán tiene cientos de manantiales, balnearios y parques acuáticos para disfrutar de los días con sol intenso.
Para empezar, contamos con una franja de más de 400 manantiales llamada Ruta de la Salud, que es conocida desde tiempos prehispánicos por las cualidades curativas que se atribuían (y aún se hace) a las aguas sulfurosas
Esta Ruta, en especial, es parte del turismo alternativo de Michoacán y dispone de distintos atractivos: la zona de Los Azufres, e Ixtlán de los Hervores contienen manantiales con ácido hidroclórico y sustancias sulfurosas, que los hacen únicos por su profundo azul. Además, están ubicados en espacios ecológicos que sustentan la flora y fauna silvestres y tienen un clima templado a frío, ideales para escapar del calor.
Los balnearios y parques de aguas termales distinguen a los municipios de Zinapécuaro, Huandacareo, Araró, Zinzimeo y San Agustín del Pulque. Además, en el Oriente, en Contepec, se encuentra Tepetongo que tiene albercas con toboganes, campos de juegos y una enorme huerta con árboles frutales de la región.
Muy cerca de Morelia, hay balnearios en Cointzio y la Tenencia Morelos. Con aguas cristalinas y servicios varios, están los parques de Puruándiro, Indaparapeo y Queréndaro y, a 18 kilómetros de la ciudad de Uruapan, se encuentra Caracha, una hermosa hacienda con más de 150 años, donde podemos bañarnos con las aguas de un manantial cercano llamado “El Hortigal”.
En otros municipios están el balneario “La Gallina”, en Gabriel Zamora; “El Pedregal”, en Antúnez; “La Nopalera” y “El Veva”, en Apatzingán; “Puesta del Sol” en Felipe Carrillo Puerto; “Vista Bella”, en Buena Vista Tomatlán, “La Pasión”, en San José de Gracia, y otros muchos que te están esperando.